lunes, 28 de abril de 2008

Vuelven los minutos musicales: Clementi

Después de muchos meses vuelven los minutos musicales a Puesfijate. No es que haya estado todo este tiempo sin tocar el piano, es que se me estropeó la cámara de vídeo y hasta ahora que me he comprado un móvil nuevo no había poddio hacer nuevas grabaciones. Hoy me enfrento con una pieza que he tocado mil veces, la primera sonatina de Muzio Clementi (1752-1832), en concreto al arranque de su primer movimiento. Estoy muy acelerado en algunos tramos, pero sólo me equivoco en una nota: la penúltima. Debería ser un sol y es un fa. Y suena particularmente mal porque, aunque el movimiento está escrito en do mayor, modula casi todo el rato a sol mayor y el fa natural suena extraño.

Aprender a tocar el piano es una de las mejores cosas que me han pasado en los últimos años. En algunos momentos me he estancado en el trabajo, la chica que uno quiere no siempre le quiere a uno -más bien casi nunca, pero de eso ya hemos hablado-, muchos amigos han tomado otros caminos para construir sus vidas... A veces se le caen a uno encima todas estas cosas juntas y se siente, no desgraciado, porque soy -somos, también en general los que me leen- muy afortunados, pero sí algo desanimado. En esos momentos una de las cosas que más me alegran es recordar cómo con 30 años decidí cumplir este sueño de tocar el piano, aunque sea regular, y cómo llevo cinco años luchando por hacerlo posible.

No toco como Lizt, nunca lo haré, pero me lo pasó fenomenal. Tengan 30, 50 u 80 años, si tienen un sueño y medios para realizarlo, atrévanse. Nunca es tarde y estas aventuras son las que dan color a la vida.

martes, 22 de abril de 2008

Y el cura subió al cielo

Esta es una historia desgraciada y terriblemente rocambolesca. Resulta que a un cura brasileño se le ocurrió batir el estúpido récord de permanecer más tiempo en el aire sostenido por globos de fiesta. Por una buena causa, eso sí. Subió y subió impulsado por mil globitos, se lo llevó el viento sobre el océano y todavía lo están buscando. Las Fuerzas Aéreas, la marina y todo el Estado de Paraná.

Ante una noticia muy dramática uno intenta adoptar un tono serio. Pero hay veces que no se puede. Un personaje de Woody Allen decía que humor es tragedia más tiempo: a nadie se le ocurrió hacer un chiste el día después del asesinato de Liconl. Pero hoy puede abordarse el magnicidio desde un punto de vista risible sin problemas. Ahora bien, en vista de cómo avanza el cinismo en el mundo yo matizaría esa proposición y diría que el humor es tragedia más distancia, temporal o de otro tipo. Cinco minutos después de que se cayeran las Torres Gemelas ya había chistes sobre el tema, aunque supongo que no se contarían en Nueva York.

En este caso, salvo que uno sea familiar directo del sacerdote, parece difícil abordar la historia sin que una sonrisa le queme a uno los labios, así de incontrolables son nuestras vísceras. Ni distancia ni tiempo, ni nada. Pasó hace unas horas y estoy seguro de que a cincuenta metros de donde vivía el curita ya están haciendo bromas. La versión actualizada y remasterizada de Mary Popins no tiene, de momento, final feliz. Y parece difícil que lo tenga. Pero qué quieren que les diga, si uno tiene que morirse, y los nuestros nos van a llorar de todos modos ¿Qué tiene de malo provocar la risa de aquella gente a quienes nuestra desaparición en otras circunstancias sólo produciría indiferencia?

sábado, 19 de abril de 2008

Jugad, que al final toca

La vida de mi amigo Alfredo no es más interesante que la del común de los mortales. Pero como cuenta tan bien las historias -le viene de familia, su tío y su hermano son escritores- da la impresión de que siempre le están pasando cosas curiosas. Su última anécdota es estupenda. Sólo me la creo porque me la cuenta él de primera mano y porque aporta como prueba un correo electrónico. Resulta que el otro día estaba esperando que se incorporara a su empresa un tipo al que le había hecho una entrevista -es responsable de Recursos Humanos- y le llegó el siguiente e-mail del individuo. No les adelanto nada, leánlo hasta el final.

"Estimado Alfredo,

Sintiéndolo mucho pero este viernes he sido ganador de una buena cantidad de dinero de una de las apuestas del estado y sinceramente tras un loco fin de semana, ahora os comunico mi renuncia al puesto ofertado por vuestra empresa, lo cual siempre agradeceré.

Siento no haber comunicado antes pero dadas las circunstancias esta es la verdad y realidad de los hechos y así os la transmito.

No penséis que os miento ni que sufro de alguna patología extraña, sencillamente ya no necesitaré trabajar como empleado nunca más y hasta el año que viene no decidiré que hacer con mi vida.

Ya se que suena a cuento pero es real, estamos mi familia y yo muy felices como podrás entender.

Os deseo lo mejor y siento mucho el perjuicio que os ocasione. Si me disteis de alta en la seg. social, darme de baja.

No os molestéis en llamarme ya que me encuentro a punto de salir de viaje.

Muchas gracias por vuestra confianza y jugad que al final toca.

Daniel XXXXXXX"

lunes, 14 de abril de 2008

...y en el cine

Hoy toca la versión cinematográfica del vídeo de ayer. Se quejaba Yulendys de que en el otro montaje aparecían sólo aparecían bellezas occidentales. Aquí pasa tres cuartos de lo mismo, quitando a Halle Berry y Salma Hayec lo más exótico que encontramos es a Sofía Loren. Ni una oriental, ni una belleza de Bollywood... ¿A cuántas reconocen?

domingo, 13 de abril de 2008

La mujer en el arte...

Puesfijate nunca ha presumido de ofrecer las últimas novedades de la red. Este vídeo de un artista anónimo (creo) lleva once meses rulando por Internet. Pero lo acabo de descubrir, gracias a Paco Maurial (¡actualice su blog, hombre!), y me parece genial. Es un viaje por la historia del arte a través de la figura de la mujer. Es un poco largo, pero la mezcla de la música de Bach, interpretada por Yo-Yo-Ma, y la belleza de las imágenes hipnotiza. ¿Tu mente interpola algún rostro no incluido en la secuencia inicial? Háztelo mirar, igual estás enamorado.

martes, 8 de abril de 2008

¡Alerta! Vacas locas

Gráfico animado: El contagio de las vacas locas (ELPAÍS.com)

Hoy nos hemos llevado un gran susto: se ha anunciado la muerte de dos personas en España por el mal de las vacas locas. Seguro que esta noche los ganaderos dormirán peor y que mañana se venderán menos chuletones. Sé que no podemos ser totalmente racionales, pero la alarma que suscitan noticias como ésta es desproporcionada. Sobre todo si nos agarramos a las matemáticas, que aunque puedan no gustarnos -a mí me encantan- son una de las pocas cosas de las que uno puede fiarse.

En su estupendo libro El hombre anumérico, John Allen Paulus, columnista y matemático explica que a menudo las causas de muerte que más pánico causan son las más improbables, a menudo remotas. Así, morir por un atentado terrorista es francamente improbable, aunque este fenómeno es imprevisible y cualquier día vemos explotar por ahí una bomba atómica y me trago mis palabras. En 2008 ha muerto una persona por esta causa en España, en 2007, ninguna, y en 2006, dos. Incluso en 2004, con los casi 200 muertos del 11-M murieron casi 20 veces más personas por accidente de tráfico. Otro ejemplo: tomando un avión al día un tipo tardaría en morir por accidente aéreo un promedio de 19.000 años.

El mal de las vacas locas pertenece a este tipo de desgracias improbables, aunque ciertamente mediáticas. En España han muerto por esta causa tres personas desde que se declaró la enfermedad hace unos diez años, si no nos mienten las autoridades. Se venderá menos ternera, pero estoy seguro que desde 1998 han muerto muchísimas más personas atragantadas por un hueso de pollo. O de resbalón en la bañera. Si supiera dibujar tan bien como mi amigo Toño pintaría a un tipo alarmado por la noticia mientras conduce a 200, fuma y al tiempo habla por el móvil. La muerte, y más si es tan terrible como la causada por esta enfermedad, siempre es una tragedia. Pero hay cosas mucho peores que no nos quitan el sueño.

miércoles, 2 de abril de 2008

30 años de Dallas

Hoy se cumplen 30 años de la emisión del primer capítulo de Dallas. A mí no me la dejaban ver porque tenía dos rombos -mayores de 18- pero la conozco bastante de tanto oírla comentar en el colegio a quienes tenían padres más permisivos. Vamos, como cuando uno viaja a París o a Nueva York por primera vez y le suena casi todo. Para celebrar la efeméride el diario The Times ha elegido los diez mejores momentos de la historia de la serie, tal y como recoge ELPAÍS.com. Someto la lista a la discusión de los especialistas.

Yo, como ya he dicho, no he visto ninguno, aunque me suenen todos. Así que cuando escucho hablar de Dallas de lo que me acuerdo es de la canción que hizo el difunto Pepe da Rosa. Todo el mundo recuerda el estribillo, "del cabo de gata hasta el Finisterre hay que ver la gente cómo está con JR". Pero eso es lo peor de la letra. El resto es mucho más ingenioso, y lo digo sin ninguna ironía. El documento no tiene pérdida y ha ganado con los años. Porque lo que entonces parecía cool -la decoración de la discoteca y la pinta del público asistente- ahora es de un delicioso patetismo. ¿Cómo se puede bailar semejante melodía? Pinchen, recuerden y disfruten.