viernes, 27 de junio de 2008

Doblemente feliz

Hoy estoy doblemente feliz. Un motivo ya lo saben, el niño de la foto vuelve a sonreír con su camiseta después de 24 años de frustraciones deportivas con la selección. El otro tiene un componente en principio económico, pero casi más sentimental. Resumo: el 3-0 de España a Rusia me ha hecho ganar una porra de 690 euros (¿o eran 790?) en el periódico.

Con ésta he ganado tres porras importantes, que detallo para los amantes de las historietas.

- Una, ésta.

- Otra, la del Mundial de Alemania, también en el periódico, cuando aposté por Italia. Lo hice para lleva la contraria porque entonces se hablaba mucho en el diario del aburrido juego de los italianos. Tenían razón quienes opinaban así, pero de tanto oírlos se me hicieron más pesados los apóstoles del fútbol espectáculo que el propio catenacio.

- La tercera, la más inolvidable, en Ecuador en un viaje de la Ruta Quetzal. Nos dirigíamos en autobús de Loja (o quizá de Cuenca) a Zamora, al borde de la Amazonía, hacia el parque de Podocarpus. El recorrido sería de menos de cien kilómetros pero la carretera estaba en un estado lamentable y había frecuentes desprendimientos. Entonces a mi gran amigo Íñigo de la Quadra Salcedo se le ocurrió subastar las posibles horas de llegada, con intervalos de cinco minutos, entre los viajeros, básicamente los adultos de la expedición: músicos, profesores, periodistas, el sacerdote etc. Yo pujé por un par de tramos horarios y gané cerca de 200 dólares, que me gasté inmediatamente en invitar a copas en el karaoke -sí, había uno- de la última localidad antes de la jungla.

Decía que esta segunda alegría de hoy -como sufrí con una oportunidad postrera de la selección, San Paulino me perdone- no era meramente económica. Cuando uno gana un juego de estos se convierte durante un rato en protagonista del círculo de amigos o compañeros que han participado. Y sin que esto suene a película de Capra ha sido mucho más gratificante el cariño y la sincera alegría con los que todos me han felicitado que el premio monetario. Mañana llevaré pasteles.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Pasteles? Estás un poco agarrado. Con 690 euros lo que proceden son percebes, querido

Anónimo dijo...

No...no...algo más que pasteles...Esto se merece un minicatering del Mallorca, ¿no?

Anónimo dijo...

¡Menos mal que ya se acabó el dichoso campeonato de fútbol!. Estaba ya del temita hasta las narices. Bien por nuestra selección, han ganado y bien que lo van a ganar. A esa gente lo de la crisis se la reflanfinfla, en cualquier caso:

¡Arriba España!,...¡Abajo Zapatero!

V.

Anónimo dijo...

Ayer quedé con Lolo y compañía en casa. 400 litros de cerveza. Gol y euforia futbolística. Desnudos. Gases. Final del partido. Celebración en la terraza y escándalo público. Me acuesto. Duermo cinco horas, me despierto y mi casa parece Beirut. Resacón del 15. Llego al trabajo y me encargan entrevistar a Juan Cruz, al que le recuerdo vuestra amistad para romper el hielo, y él me dice que va a ser porque sois tío y sobrino, cosa que yo ignoraba. Me cago en mi calavera. Fin.

Unknown dijo...

Primo, estás encantador en esa foto, que debe de ser más o menos de cuando jugabamos al Lepanto y al Anti-Jeu.

En fin, yo acabo de salir a la superficie después de DOS meses ininterrumpidos de examenes. Prometo volver por aquí, aviso.

Y como solución de consenso entre los pasteles y el mini catering del Mallorca (siempre de moda en El País) podrías optar por unos pasteles del Mallorca, digo.

Viva España.

Anónimo dijo...

El niño de la foto vuelve a sonreir...que cara tienes, Berni, si cada vez que gana el Madrid te partes el pecho ¿Disfrutaste más con la Eurocopa o con la 7ª (1ª en color)?
Me apunto al catering del mallorca o a lo que sea con tal de que te invites a algo con todas esas porras que ganas.
Saludos genarianos.
PD: Hay que hacer las camisetas de "Va por ti Genaro" para la próxima semana santa.