jueves, 23 de octubre de 2008

Salvemos La Gaceta de Canarias

Me cuenta, desde hace semanas, mi amigo Paul la dramática situación que atraviesa el periódico La Gaceta de Canarias. Algunos de sus trabajadores llevan dos meses sin cobrar. Hay dudas de que pueda seguir operando porque no hay dinero para pagar la licencia informático. Y esta misma tarde ha suspendido pagos. Sus profesionales se han movilizado y desde hace días no firman las informaciones que aparecen en el diario. Lo próximo serán paros y una posible huelga indefinida a partir del próximo 10 de noviembre.

No amigos, no es sólo la crisis. Los trabajadores se quejan de que una mala gestión empresarial les ha llevado a esta situación. Quizá el problema ha sido querer gestionar periódicos como si fueran empresas de construcción. Y me temo que son cosas muy distintas. Como dice muy certeramente el Manifiesto por la Supervivencia de La Gaceta de Canarias, "un medio de comunicación no es una empresa más, sino que tanto las sociedades que las gestionan como sus trabajadores son depositarios y de alguna manera garantes de un Derecho Fundamental reconocido en la Constitución Española de 1978. Por ello, tanto unos como otros tienen la obligación de actuar con responsabilidad y ser conscientes de la importancia de su función social".

Los otros medios resumimos las noticias como esta con números, tantos despidos, tantos millones de deuda, tantos meses sin cobrar. Pero detrás de estos números están el padre con tres hijos que se queda sin empleo, el joven que acaba de firmar una hipoteca, el profesional veterano que tendrá muy difícil volver a encontrar trabajo... Un drama doble: el que sufre cualquier empresa en quiebra y el empobrecimiento democrático que sufre la sociedad cuando cierra un periódico. No suelo pedir nada a los lectores de Puesfijate pero esta vez les pido que, si les he convencido, FIRMEN AQUÍ, en la Plataforma de Apoyo a La Gaceta de Canarias. Yo, naturalmente, ya lo he hecho.

12 comentarios:

Anónimo dijo...

"...Un drama doble: el que sufre cualquier empresa en quiebra y el empobrecimiento democrático que sufre la sociedad cuando cierra un periódico...".

Menuda frase amigo Berni, claro que es un drama, perder la fuente de donde mana el alimento de los tuyos es tan dramático, como cuando una enfermedad se ceba en tu casa. Igual alguno de nosotros no podemos valorar lo que tenemos.

Respecto a "..empobrecimiento democrático que sufre una sociedad cuando cierra un periódico..." mmmmmmm......... bueno, no soy asiduo lector de La Gaceta, que es el caso que nos ocupa, dejémoslo para una conversación en la barra fija.
(Agustín)

Paul dijo...

Gracias, amigo. Sí que existe ese empobrecimiento, porque lo primero que se empobrece es la pluralidad, y ello se nota mucho más en un terruño hermético y limitado como Canarias. El periódico, efectivamente, ha entrado en concurso de acreedores, y no ha habido una sola entidad en la historia del archipiélago -salvo la UD Las Palmas- que haya salido con vida del proceso, por lo que hoy todos tenemos motivos para la tristeza.

Pero aún sí se puede hacer algo. Se puede recordar que el responsable directo de este desaguisado no va a levantar cabeza durante años, con la cantidad de causas judiciales que le han caído. Se puede uno pasar hoy mismo, si vive en Santa Cruz, por las inmediaciones del periódico, si quiere ver su cara empapelándolas con la palabra que le describe. Puede pasarse todos los días a las seis de la tarde para asistir al lamentable espectáculo de nuestras manifestaciones diarias (en las que, por cierto, regalamos el periódico). Y por supuesto, puede firmar en la dirección que ofrece Berni, no para salvar la cabecera, que eso ya es imposible, sino para impedir que la vida de familias enteras vuelva a depender de tipos como éste, que por si no ha quedado claro es constructor. Ojalá sea verdad que ya les ha llegado la hora de la ética a estos tipos, hasta ahora representantes de ese capitalismo al margen de la ley que estos días se tambalea, con consecuencias tan dramáticas para todos.

Al que firme, mil gracias. Y al que no también, aunque sinceramente espero que deje de actuar como yo, que me creía que sacar un doctorado me iba a arreglar la vida al día siguiente. Un fuerte abrazo.

Unknown dijo...

¿No tienen dinero para pagar la licencia informática? Qué instalen Ubuntu y programas libres y gratuitos. Eso para empezar.

Y para seguir, que empiecen a pensar en okupar las instalaciones del periódico y seguir publicándolo diga lo que diga la empresa. Gestionándolo mejor, claro. Digo yo que es mejor intentar pelear que quedarte en la calle.

Yo también echaré una firma. Pero esto no se resuelve con firmas, sino con hechos, acciones, medidas...

A grandes males, grandes remedios.

Paul dijo...

Gracias por el apoyo y la remisión a Ubuntu, Andrés. El periódico sigue saliendo; otra cosa diferente es que lo trabajemos, porque, desde el punto de vista del contratado, éste le vende su trabajo a la empresa, y fue ella la que dejó de comprárnoslo desde hace dos meses, tres en el caso de algunos compañeros. ¿Tú trabajarías al mismo ritmo acumulando tres mensualidades de impagos? ¿Y dos? ¿Y una? La medida no sólo es justa y necesaria, sino inevitable además, porque de entrada las circunstancias forzaron a reducir el paginario, haciendo imposible la continuidad del proyecto tal y como se concibió.

Anónimo dijo...

Berni, la firma para qué? Para que una empresa privada reciba dinero público (de los impuestos que pago, de mi esfuerzo). Lo siento. NO.

Paul dijo...

Exaltado Ánónimo, la firma no te va a costar dinero. Se trata sólo de una campaña de apoyo social para que no desaparezca el periódico, y a la que se han sumado ya todas las instituciones de Canarias, alcaldes y diputados a título personal, autónomos, deportistas, artistas y profesionales de todos los sectores. Si los trabajadores terminamos recibiendo dinero de tu esfuerzo, como dices, será porque un empresario privado nos aboque al Fondo de Garantías Salariales, agotadas antes todas las demandas posibles habidas y por haber. Yo firmaría precisamente para que desaparezcan estos empresarios basura, que piensan que si sus pelotazos salen mal ya los paliarán el resto de los españoles.

Anónimo dijo...

Firmado está. Las objeciones me recuerdan un poco al discurso anti ONG de ¡a saber adónde va a ir nuestro dinero! Bueno, si no das está claro adónde no va a ir.

Un periódico que ni se ha cebado con la isla de enfrente, ni ha fomentado el odio al godo, al canarión o al de Pico alto bien vale una firma.

Y a las barricadas si hay que ir se va, pero ir por ir...

Anónimo dijo...

Paul, me caes muy bien pero pensar que un doctorado te iba a resolver la vida es como creer que la madre de Marco iba a aparecer sana, rozagante y saltando sobre una pata.

Paul dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Paul dijo...

Tienes razón, en el fondo no soy más que un cateto con birrete.


Perdón por el borrón de arriba

Anónimo dijo...

Nada de malos rollos!
Sabiendo hacer tan bien vuestro oficio se me antoja necesario poner en práctica la acción. Debéis seguir vendiendo palabra, además, en las adversidades se agudiza el ingenio (del cual, reitero, no estáis faltos).
Otras empresas hubo que incluso Estados (ciertos politiquillos que ahora andan desaparecidos con otro lustro) quisieron hundir y ahí continúan vendiendo productos lácteos y magdalenas (no es equiparable la ejemplificación, mas...)
Ahí va otra firma.
Mucha suerte!
El Vecino.

Paul dijo...

Gracias, Vecino. Por supuesto, seguimos vendiendo palabra, aunque ahora lo hagamos fuera del periódico, con declaraciones a las radios, apareciendo con pancartas en los partidos de fútbol (gracias, compañeros de la tele), y con debates tan interesantes como éste al que está dando pie el blog de nuestro común colega. La palabra, por supuesto, ahora y siempre. A veces es lo único que nos queda.