jueves, 1 de mayo de 2008

Adiós, viejo amigo

Hoy me he despedido de un viejo amigo. Mi querido Volkswagen Polo TF-6246-BP, mi primer coche. Lo he llevado al desguace porque me salía carisimo arreglarlo y apenas lo cogía. Le he dado muy mala vida: diez años durmiendo en la calle en algunos de los barrios más botelloneros de Madrid hacen mella en cualquiera. De momento no me compraré otro: he calculado que me sale más barato usar el transporte público y alquilar uno, si tengo que hacer un viaje.

La despedida no ha sido fácil. En estos años hemos hecho muchos viajes juntos y hemos vivido muchísimas aventuras. Alguna vez me ha dejado tirado, pero pocas para el mal trato que ha sufrido. Lo fui a buscar a Cádiz y luego me ha acompañado al Pirineo, al Levante, a León, a Busto (tantas veces...), a Santander... Me han dado 50 euros por él. Sólo he rescatado el gato, los triángulos, el chaleco y mis amuletos: una cinta de la virgen del Pilar que me regaló una amiga de Zaragoza y la estampa del Cristo de Portobelo (Panamá), la piu grande proctezione per la mia maquina.

Me ha dicho el del desguace que algunos lloran al entregarlo. En mi caso no ha sido para tanto, pero me he emocionado y hasta me ha parecio que me decía adiós con las luces de freno cuando lo aparcaban. En Canarias, en el campo, hay mucha gente que cuando retira un vehículo lo aparcan delante de casa, o junto a la huerta, y lo dejan ahí pudriéndose. Yo no tengo patio para dejarlo, pero con el síndrom de Diógenes que padezco hubiera hecho algo parecido. Adiós, colega, fue un placer. Siento haberte llevado al chatarrero, si Chillida siguiera vivo habría tratado de convencerle para que hiciera de ti una obra de arte.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Espero que al menos haya tenido usted la decencia de limpiar y fumigar el asiento de atrás. Ah, claro, que por eso le han dado sólo cincuenta euros. Disculpe.

Anónimo dijo...

En esta familia nos cuesta desprendernos de los coches. El Peugeot era letra C, luego tuvimos un Volvo pequeñito W y el de ahora ni lo miro porque paso de cogerle cariño. El día menos pensado lo llevan al desguace y te cuentan que se ha ido al cielo por la autopista de Michael Landon.

Anónimo dijo...

Por cierto, a mí me dieron 600 por el mío y tenía descabezada la palanca de cambios, una puerta crujía al abrir y cerrar,la otra estaba abollada y sin defensa, la puerta de la guantera colgaba y faltaban los 4 tapacubos. Me parece que alguien ha sido vilmente timado.

Anónimo dijo...

Y por qué no lo has llevado a La Laguna a que el Kuko se pasee los últimos días que le quedan de vida?

Anónimo dijo...

Una pena despedirse del viejo coche. Si ese VW polo hablara o hablase...
Como conductor que fui de él en algunas ocasiones, tambien le cogí cariño. Recuerdo el viaje a Frias cuando se le salía la 5ª en medio de la autovía. También me acuerdo de verle aparcado semanas enteras por el "barrio más botellonero" de Madrid con su pegatina en el culo de "Busto de Bureba" y sus parachoques de distinto color.
Adios amigo!
Adios .

Anónimo dijo...

Puffff... no lo sabía... yo también me divertí en ese coche.
Besos.
vaca parada