lunes, 1 de diciembre de 2008

Los peores hinchas de la historia

El pasado viernes la noticia más leída en la edición digital de The Times era una relación de los peores aficionados al fútbol de la historia, aquellos que uno no querría que animaran a su equipo. No entendí muy bien la relación de personajes, que incluía desde Adolf Hitler (hincha del Schalke 04) hasta Bin Laden (seguidor del Arsenal), pero también a Tom Hanks (Aston Villa) o Gordon Brown (Raith Rovers). Tom Hanks o Silvester Stallone (también citado, como forofo del Everton) me interesan poco pero los dos primeros personajes sí que me producen más curiosidad. ¿Qué pasiones futbolísticas animaban a los mayores monstruos de la historia? Apoyándome en el artículo de The Times y con Google y mi modesto acervo cultural como únicas armas de investigación he elaborado esta lista con los afectos deportivos de cinco personalidades siniestras del último siglo: Hitler, Mussolini, Stalin, Bin Laden y Franco. Ya me darán su opinión.

Adolf Hitler. Cuenta The Times que el dictador alemán tenía entre sus pasiones al Schalke 04, el equipo minero, que dominó la liga alemana precisamente -no sé si es casualidad- durante los años 30 y 40, coincidiendo justamente con el apogeo del nazismo. En aquellos años ganó nada menos que seis campeonatos de Alemania, el primero en 1934, con Hitler ya en el poder. "Ganar un partido -escribió Joseph Goebbels, ministro de propaganda- es más importante para la gente que conquistar una ciudad en el Este". Después de la guerra, el Schalke no volvió a ganar un campeonato hasta 1958.

Emilia-Romagna, la región italiana que alumbró a uno de los seres más sublimes de la historia, Giuseppe Verdi, también fue la cuna de Benito Mussolini. El Duce, por lo que cuenta The Times, fue seguidor del Bolonia, la capital de la región, una ciudad que, paradojas del destino, es llamada, por la inclinación política de sus habitantes, Bolonia la Roja. Y como en el caso de Hitler, y sin que uno quiera ser mal pensado, el equipo vivió sus mejores años justo cuando se hallaba en el Gobierno el más poderoso de sus seguidores. El Bolonia, fundado en 1909, ganó el primer Scudetto en el año 1924-25 (Mussolini subió al poder en 1922). Entre 1925 y 1941, su época dorada, y la del fascismo, conquistó cinco campeonatos. No ha vuelto a ganar ninguno.

No he encontrado ninguna pista que demuestre que a Joseph Stalin le interesara el fútbol. La Federación Rusa de Fútbol (la Georgia natal del dictador soviético pertenecía a los zares desde 1800) se fundó en 1901, cuando el embrión de monstruo tenía ya 23 años. Y a esa edad es difícil aficionarse, supongo. Hay sí, un equipo en su localidad natal, Gori, el Dila Gori. No consta que brillará especialmente durante la época soviética. De hecho se fundó en 1949, cuando a Stalin le quedaban sólo cuatro años de vida. Y aunque no sabemos si el Padrecito era seguidor del club, sí parece que los hinchas del equipo tienen al ex dictador algo de cariño. Así al menos lo leo, y perdón si me equivoco,en un blog llamado mentiratroskista, que no consigo saber si está escrito en serio o en broma por muchas vueltas que le doy. Pues bueno, cuenta la autora del susodicho blog que algunos de los cánticos más ácidos de los seguidores del Dila Gori están dedicados a Leon Trosky, el mayor enemigo de Stalin. Hay uno en concreto que dice: "Qué feo llamarse Leon Troksky, que en México te has tenido que ocultar..." y luego suelta dos lindezas contra su madre y su hermana que no reproduzco, pero que pueden leerse pinchando el enlace de arriba. Insisto, yo no sé si esto es verdad o cachondeo pero como dirían los italianos, si non è vero è ben trovato.

El amor futbolístico de Bin Laden es el Arsenal, a cuyo campo acudía cuando vivió en Londres a principios de los 90. Y estuvo al menos dos veces en la tribuna de Highbury, en el Arsenal- Torino y el Arsenal-PSG en la temporada 1993-94, el año que el equipo se hizo con la Recopa contra el Parma, según cuenta Adam Robinson en Behind the Mask of the Terrorist. En noviembre de 2001, tras los atentados del 11-S, el club vetó la presencia del saudí en el estadio, por si se le ocurría volver por allí. Quizá influyera en su afición el hecho de que su gran rival en el derby del norte de la ciudad sea el Tottenham Hospurs, el equipo de los judíos británicos. Se dice incluso que en el pasado quiso comprar el club. Quizá si lo hubiera hecho habría canalizado su agresividad por otros cauces y ahora viviríamos más tranquilos.

Y llegamos a Francisco Franco. Tengo que decir que leí gran parte de la biografía que escribió sobre él Paul Preston y no recuerdo ninguna referencia al fútbol. Quizá porque me fijé sobre todo en su infancia, en la formación psicológica del personaje. Al oficial sin tres emes, como le llamaban en Marruecos, o sea, sin mujeres, sin misas y sin miedo, parece que sí le gustaba una efe, la del fútbol. Eso, o era masoquista, porque le recordamos muchas veces en el palco del Bernabéu aplaudiendo a rabiar y entregando su propia copa, normalmente a Gainza. ¿De qué equipo era Franco? Según la leyenda más extendida, del Real Madrid. Aunque si es cierto no parece que tuviera tanta mano como Hitler o Mussolini. El Madrid tardó 19 años en ganar una Liga durante el franquismo, acontecimiento que coincidió precisamente con la llegada de Di Stéfano. Mientras, el Barcelona había ganado cinco y el Atlético de Madrid, cuatro. Su Copa, la copa del Generalísimo, se la entregó nueve veces al Barça, ocho al Athletic y sólo seis al Madrid. Otras fuentes aseguran que el dictador era seguidor del Athletic de Bilbao o del Depor, el equipo de su tierra. Pero la teoría más curiosa la he encontrado en varias páginas de internet que aseguran, aportando pruebas bastante contundentes, que si no era del Barcelona, al menos le apoyó bastante. De hecho el Caudillo tiró para atrás el proyecto de recalificación urbanística que le presentó Bernabéu en 1960 mientras que el equipo azulgrana se benefició entre 1951 y 1965 de tres operaciones similares. La tercera -la venta de les Corts- aprobada por decreto en consejo de ministros firmado por el propio Franco. El tipo de este vídeo lo cuenta con pretendida gracia.

Buenas noches.

6 comentarios:

scotchanddrive dijo...

Oh! Menos mal que lo has abierto a comentarios, porque es carne de demagogia. Qué difícil es juntar a tantos fascistas en un artículo que no hable de fascismo. Al menos no en el sentido estricto. Por cierto, el Arsenal es famoso por su antisemitismo salvaje. Quizás de ahí le viene la afición al amigo barbudo.

Anónimo dijo...

¿Si Franco levantara la cabeza, la levantaría también el Madrid? ¿O al Madrid ya no lo levanta ni la madre que lo parió? Y que conste que lo digo con cariño.

Paul dijo...

Felicidades por la entrada, Berni. Menea esto YA.

Anónimo dijo...

Berni...como sabía que ibas a escribir este post... :-D

Anónimo dijo...

Un tema que siempre da conversación en la barra de algún bar como a nosotros nos gusta.
Nos vemos pronto y hablamos de si el Madrid levanta cabeza, la cultural asciende con o sin milagro de Genarin y la Ponferradina que sigue jugando en el "Toralin".
Alf.

Anónimo dijo...

¡Un post por los 36!