domingo, 4 de noviembre de 2007

Parentesis indio

No estoy escribiendo ultimamente en el blog porque paso unos dias en Nueva Delhi. Antes de venir a India me sorprendia que vivieran aqui 1.200 millones de personas. Ahora la cifra me parece baja. Creo que ya me he encontrado al menos con unos 2.000 millones. Es una lastima que no puedan transmitirse los olores por Internet porque a mi vuelta a Madrid, en un ordenador con acentos, me gustaria hablar precisamente de eso. Este pais huele todo el rato, intensamente. A veces muy mal, a veces de maravilla y a veces una mezcla, que es como peor huelen las cosas. Me deslumbran los paisajes, me encanta el paisanaje. Pero lo que ha hecho trizas mi capacidad de asombro es el trafico. En cualquier momento, por cualquier lado, puedes ser arrollado por un coche, una bicicleta, un elefante, una vaca. Habra que tener cuidado. Hasta la vuelta.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Si la envidia fuera tiña yo estaría hoy como Dikembe Mutombo. Pásatelo bien, cabronazo, y no dejes de contarnos a la vuelta. La India, China y Japón son tres de mis cuentas pendientes con el tiempo y las agencias de viajes.

Unknown dijo...

Suscribo lo antedicho por Jebi. Nosotros callados como putas y a cambiar pañales. Como dijo el mago: "Nadie te mandó".

Yulendys Jorge dijo...

La verdad es que a mí también me ha pinchado la espinita de la envidia, pero de la buena.

Berni, pensé que el tráfico dominicano había fulminado tu capacidad de asombro :)

Un beso.

Anónimo dijo...

Tiene razón Manolo, los pañales huelen peor y son menos exóticos.
Son muy monos los niños, se parecen a los gamberros de la plazita.